sábado, 15 de diciembre de 2012

ACÉRCATE



Recuéstate en mi noche como una melodía que no acaba,
cerca del refugio en  donde anidan mis anhelos.
Del mundo que me habita  cuando las sombras caen,
quiero compartir sus estrellas, caminos y misterios,
un cielo fracturado por las flechas del relámpago
y el llanto de los árboles, pecho abierto a los dolores.

Ven, inclínate a mi lado y escucha los latidos
que caen como soplos de  arrulladores astros
sobre la piel versátil de la tierra.
Acaríciame, roza mi aterciopelada oscuridad,
en un encuentro predicho en tus sueños.
Imprégnate del fulgor secreto que me invade,
será una comunicación entre tú , yo
y  el cosmos.

Acércate, no huyas sin haberme conocido,
sin que mis labios entreguen el mensaje íntimo
del misterio que poseo,
sin que sientas la caricia de mis adormecidos élitros.

Cerca de mi presencia hay vida que no cesa de fluir,
es un río inconmensurable de grandeza,
un silencio que navega bajo las sombras
hasta hallar ese instante sagrado, mezcla de alba y anochecer
que dará la chispa primordial una y otra vez,
por toda  la infinita  eternidad.

2 comentarios:

  1. Hermoso. Realza la importancia y el respeto que deben tener los momentos como "aquellos".

    Que nunca acaben!!

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  2. Así es estimada amiga Manchita, amémonos y amemos la naturaleza, respetémosla y seamos agradecidos. Besitos de Marianela.

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