miércoles, 15 de noviembre de 2017

HUMANOIDES





Hemos sido sembrados desde las estrellas, polvo estelar, o huevo cósmico. Da lo mismo, por siglos se nos ha ocultado la verdad, vivíamos en el limbo, preguntándonos, infinidad de dudas, creando confusiones y desacuerdos sin llegar a una respuesta tan importante. Y hemos descubierto, al fin, que el ADN es el origen de la humanidad. Esas viejas construcciones de nuestros antepasados, poseían estelas con dibujos del ADN. Las respuestas estaban allí, y aun creíamos que eran sólo extraños diseños de nuestros ancestros, como el árbol de la vida, los genios voladores o alados, la espiral del ADN, las serpientes entrelazadas, el huevo de Algarve. Hoy se está aclarando nuestro origen, poco a poco, vamos adquiriendo el conocimiento que yacía oculto. El centro del universo en nuestra cabeza y el tercer ojo.
Sabemos a ciencia cierta que estamos conectados con cada ser extraterrestre que habita en el universo y muy pronto sabremos la verdad de los alienígenas que ya están conviviendo entre nosotros y, dicen los científicos que serían unas 60 razas diferentes. Ahora la pregunta es, ¿han llegado como amigos o como invasores? ¿Qué quieren de nosotros o de nuestro planeta? Se dice que muchos gobiernos tienen relaciones con algunos de ellos, de ahí el tremendo salto quántico y científico que hemos dado en la tecnología. Como que algunas de las naves u ovnis es posible que ya sean terrestres y en este momento tendríamos bases en la Luna y en Marte.

Entonces, ¿qué pasa con las abducciones, desaparecimientos, y los hombres de negro? ¿Fueron artimañas de los gobiernos para desorientarnos, o es que los alienígenas humanoides son los que nos gobiernan actualmente?

miércoles, 1 de noviembre de 2017

SORTILEGIO



Apareces en el umbral del pensamiento
como un presagio, al salir la luna menguante.
Traspasas las fronteras de la certidumbre
y allí estoy atada a un momento,
un segundo que se alargada sin que pueda detenerlo.
Te deslizas siempre sobre el lomo del viento
y galopas en aras de la esencia de un beso.

Ya no sé cuándo apareces,
mis ojos te aguardan sumidos en un sueño,
hechizados por la osada luminosidad de tu presencia.
Un perfume avanza las barreras de la realidad
y la imaginación sucumbe ante tanto goce.

El sortilegio de tus palabras en mi mente
borra las barreras tiempo, distancia, sueño,
lo intencional de lo circunstancial,
lo misterioso de lo seguro,
el temor de la valentía, todo eso llega a mí
cuando te asomas con el embrujo que posees
y transformas mis inseguridades con el roce leve
de tu encantamiento.

El hechizo no desaparece, aún cuando estoy despierta,
el aroma de tu ensueño envuelve mis pensamientos
llevándome al mundo imaginario,
en donde tengo la certeza,

habitas eternamente.